El traumatismo encéfalo craneano y diversas lesiones en la médula espinal son los principales peligros a los que se enfrentan los trabajadores que se desempeñan en este sector productivo.
Normalmente, se piensa que las principales enfermedades laborales en minería se derivan del contacto con la polución, las que desembocan en diagnósticos como silicosis, bronquitis crónica, entre otras. Sin embargo, a lo largo que han avanzado los años hubo un aumento considerable en el trabajo de la minería, las enfermedades neurocerebrales ocasionadas por accidentes laborales son cada vez más frecuentes en las faenas.
Según el doctor, neurocirujano y director de la Clínica Los Coihues de Santiago, Roberto Maturana, “aunque hoy en día existen en todas las empresas mineras bastantes adelantos con el tema de prevención de accidentes que causen lesiones neurocerebrales, aún hay trabajadores que se accidentan, ya sea por no seguir las instrucciones de seguridad o por los peligros del trabajo en sí”. De esta manera, se hacen frecuentes los traumatismos encéfalo craneanos (TEC) y las lesiones en la médula espinal. Todas estas derivadas de golpes o caídas que se producen mientras se realizan las labores mineras.
Cuando el accidente no es fatal y los trabajadores quedan con lesiones neurocerebrales pueden quedar con secuelas, como por ejemplo, la discapacidad, que es una de las más frecuentes en los TEC y las lesiones medulares. Es importante recalcar que los trabajadores jóvenes son quienes se ven más expuestos a estos accidentes, debido a que son nuevos en el manejo de maquinaria y no poseen la experiencia necesaria para evitar lesiones: “El traumatismo encéfalo craneano afecta agente joven que está laborando, como por ejemplo, los trabajadores mineros, quienes quedan con lesiones causadas por caídas o golpes”, expresó Maturana.
Secuelas
Una de las consecuencias de los daños neurocerebrales puede ser la discapacidad. En cuanto a las lesiones medulares -las que pueden derivar de un golpe en la espalda, cuello o fractura de columna- las secuelas son: pérdida de sensibilidad en el cuerpo, problemas de impotencia, mal funcionamiento de la vejiga e intestinos, entre otros.
Los traumatismos encéfalo craneanos, tienen una mortalidad de un 40% y entre los que sobreviven las secuelas van desde el estado vegetativo a dificultades cognitivas y fisicas. Sin embargo, éstas pueden no ser permanentes si se cuenta con el tratamiento médico adecuado para la recuperación.
Rehabilitación
Actualmente, existen una serie de tratamientos nuevos para recuperar a los sobrevivientes en estos accidentes laborales mineros. Estos métodos incluyen kinesiólogos personales, trabajo con terapeutas ocupacionales y además, ayuda en la rehabilitación psicológica de la familia del trabajador accidentado.
El Hospital del Cobre en Ca-lama realizó un convenio con la Clínica Los Coihues de Santiago, con la idea de que los trabajadores de Codelco expuestos a este tipo de lesiones puedan recuperarse de manera íntegra, gracias a un trabajo que se equilibra con calidad humana y avances tecnológicos.
El director de la Clínica Los Coihues, Roberto Maturana, recalcó que las secuelas neuro- cerebrales sí tienen solución e hizo un llamado a dejar de pensar que el cerebro no se puede recuperar. “Todas estas enfermedades pueden someterse a rehabilitación con tratamientos intensivos que lograrán que los afectados mejoren sus funciones”, dijo Maturana.
Fuente: El Mercurio de Calama