Antofagastina de toda la vida, muy unida con su familia y por sobre todo minera de corazón. Así se describe Carolina Ramos (30), operadora de pala eléctrica de la División Gabriela Mistral (DGM), quien fue la acreedora del premio “Mujer Destacada en Minería 2015”, reconocimiento que otorga el Ministerio de Minería a aquellas mujeres que han contribuido a la industria no solo en cuanto a producción, sino que con sus habilidades que les permiten hacer un aporte relevante en las relaciones laborales entre los trabajadores y trabajadoras.
El concurso, que se realiza todos los años, también busca estimular la presencia y participación de la mujer en el sector minero y a la vez, realizar un reconocimiento a aquellas que han asumido este desafío. Esto considerando que según estadísticas del Estudio de Fuerza Laboral de la Gran Minería Chilena 2014 – 2023, la presencia femenina en la industria alcanzó un 7,3% el 2014, sólo un 0,2% superior al año anterior.
Es por esto que el Ministerio realizó un llamado las diversas firmas, organizaciones mineras y asociaciones gremiales, para que postularan a sus trabajadoras en las categorías pequeña minería e industria minería (mediana y gran minería). En el caso de Carolina, División Gabriela Mistral apostó por ella debido a su experiencia y trayectoria en la empresa, pues llegó en el 2007 cuando la minera aún era Gaby SpA.
En aquel entonces había hecho solo un curso de maquinaria pesada y con los consejos e historias de su padre – también operador de camiones – tomó la decisión de ingresar a DGM con solo 21 años. Allí se ha capacitado y progresado, por lo que trabaja actualmente en el área de Gerencia Mina.
Carolina ¿cómo recibiste este reconocimiento de ser la Mujer Destacada en Minería 2015?
Es un orgullo ser reconocida por mi trabajo. Es un gran logro destacar en la minería, en un ambiente que hasta hace poco era sólo para hombres. Pero para eso estamos nosotras en División Gabriela Mistral, para demostrar que se puede, para romper esquemas. El grupo minero tiene un papel muy importante en mi vida laboral; siempre me alentaron y entregaron la confianza para superar todos los desafíos que me he impuesto en mi trayectoria como operadora. Sin su apoyo no hubiese llegado a operar el equipo que actualmente tengo a cargo, como es la pala, el sueño que tuve desde que ingresé a División Gabriela Mistral.
¿Siempre quisiste estar en la industria minera?
Por mi papá soy minera. Él trabajaba en esto y me explicó sobre el rubro, por lo que desde niña tuve este sueño. Mi papá también operaba camiones, pero estuvo poco tiempo por complicaciones con su salud, por eso no pudo seguir, pero él me incitó a mí a continuar en la minería. Hice un curso de maquinaria pesada en el 2005 y División Gabriela Mistral fue la primera empresa de minería a la que ingresé, soy hecha 100% en Gabriela Mistral.
¿Podrías contar un poco sobre tus inicios en el rubro? ya que fue la primera vez que te enfrentabas a trabajar en la minería.
Me costó ingresar a una minera, como en ese tiempo recién se estaba abriendo el mundo de la minería para las mujeres nos llamaban poco, pero cuando Gabriela Mistral hizo el llamado para las trabajadoras ahí ya el porcentaje de mujeres subió en esa faena, entonces yo llamé y ahí me contactaron. Una vez adentro debo decir que no se me hizo difícil porquerecién estaba comenzando la empresa. Los primeros trabajadores empezamos en una escuelita, entonces comenzamos todos desde cero. Igual había mucha más gente que venía sin experiencia como yo, pero la mayoría éramos jóvenes, entonces para nosotros fue una escuela, fue un aprendizaje en el que nos explicaron todo, tanto lo teórico como lo práctico.
¿Cuáles fueron los primeros equipos que empezaste a operar?
Comencé con el camión aljibe y de ahí mismo la empresa me mandó a sacar la licencia A4. Cuando la saqué me certificaron en el camión y como nosotros somos una minera autónoma y los camiones se manejan solos tuve que aprender a operar otros equipos: el bulldozer, la motoniveladora, la excavadora, de ahí me subieron a la perforadora eléctrica y luego a la pala eléctrica, eso es lo que hago actualmente.
¿Cómo es operar un equipo de grandes dimensiones?
Bueno yo trabajo 12 horas diarias en un turno 7×7. Cuando comienzo voy directo a la pala, tengo que chequearla, que no haya ningún problema y empiezo a cargar, ya que la pala es un equipo de producción, es lo más fuerte de la mina. Me gusta demasiado, aunque las dimensiones son gigantes (…) una en un comienzo está con temor, pero no por el hecho de que me vaya a pasar algo sino porque le podría pegar al camión cuando se está en proceso de carga o dañar el mismo equipo, pero dentro de éste una se siente muy segura.
Recepción en la industria
Del 7,3% de mujeres trabajando en minería, la mayor parte de ellas está actualmente en labores relacionadas con la operación de equipos móviles. Las empresas proveedoras de la gran minería locales aportan con un 5,7% en presencia femenina, mayoritariamente incorporada en áreas como extracción mina e ingenieras especialistas en mantenimiento.
Históricamente la presencia femenina en la Codelco fue escasa y se limitaba a labores administrativas. Hoy la estatal ha logrado alcanzar una presencia femenina de un 8,7% en su dotación (aproximadamente 1.600 personas).Si bien la industria minera se ha caracterizado por poseer una cultura predominantemente masculina, en Codelco se ha logrado romper la tendencia incorporando a mujeres en cargos de diversa índole y responsabilidades.
¿Cómo ves la creciente incorporación de las mujeres en la industria?
Mira yo no sé si en otra faenas se dará, pero en Gabriela Mistral somos la minera con la dotación más grande de mujeres, no se nota mucho que fuera un ambiente de hombres, ya que en la minera tenemos jefes de turnos que son mujeres; tenemos un gerente de recursos humanos que es mujer, algo que antes no se veía, solamente era un mundo de hombres. Hoy tenemos analistas, en el turno son cinco mujeres y los compañeros siempre nos han apoyado, antes eran temas de los chistes o vocabulario por la radio, pero ya no, se han vuelto más respetuosos y delicados. Ellos se acostumbraron, hubo un cambio totalmente de la cultura minera.
¿Por qué crees que se dio este cambio?
Porque hemos demostrado que tenemos las mismas capacidades, como también aportamos con otras cualidades, por ejemplo, somos más detallistas ya que chequeamos mejor los equipos, quizás cuidamos que el equipo esté más ordenado para el otro turno. Son detalles pequeños pero que tienen gran significado. Somos más fijonas, cuando el equipo tiene una falla mínima nosotras las detectamos.
¿Qué crees que se debería hacer para continuar aumentando la dotación de mujeres en las mineras?
Creo que va en la confianza que cada empresa debe tener para recibir mujeres. Hoy en día deben existir empresas que aún están como en el pasado y les cuesta confiar en nosotras, quizás por el tema de quedarse embarazada, a diferencia del hombre que no, por eso falta que las empresas confíen en las capacidades y en los conocimientos de las mujeres. Al final no se pierde nada, al contrario se gana un trabajador. Gracias a Dios en Gabriela Mistral no se ha dado, al contrario tenemos todos los beneficios para las mujeres, como la Sala Alma (sala de lactancia materna), también las mamás pueden bajar un día antes, es decir, cuando sea mamá voy a tener muchos beneficios como los que hoy las mujeres mineras tienen. Todo está adaptable para que estemos en faena.
¿Qué les dirías a las mujeres, estudiantes, dueñas de casa, que al igual que tú nunca han ingresado a la minería y que quieren hacerlo?
Es un desafío para nosotras, pero hay que atreverse; tienen que hacerlo. Hay que sacarse la barrera y los límites de decir que ‘no me la voy a poder’, ‘es un tema de hombres’, hay que romper esa barrera. Tenemos las mismas capacidades, inclusive diría que un poquito más porque somos más detallistas en los trabajos, entonces hacemos exactamente la misma pega con la misma responsabilidad, estamos en las mismas condiciones. Hay que atreverse.
¿Cuáles son tus sueños y desafíos de ahora en adelante?
Quiero seguir especializándome y ser la primera mujer operadora mayor en la División. También quiero ser la primera instructora de equipos en Gabriela Mistral y así seguir creciendo al interior de la organización.
( NM)