Gustavo Lagos
Profesor Titular
Universidad Católica de Chile
El precio del cobre se acerca a US$ 3 la libra y BHP rompió el silencio sobre nuevas inversiones mineras de cobre. La aprobación para construir una planta concentradora en Spence son muy buenas noticias para la minería chilena, por cuanto es el primer anuncio de una gran inversión de una minera privada en Chile en 5 años.
Desde hace algunos meses se especulaba que en el segundo semestre se producirían algunos anuncios en la minería mundial, y también en la chilena. Spence era un candidato potencial. Quebrada Blanca es otro candidato. Y podrían venir varios más ahora que se rompió el hielo.
La noticia de Spence es muy buena para Chile.
Primero, el proyecto se hace en el país, siendo que BHP tiene otro proyecto competitivo en EE.UU. que podría haberle ganado el lugar a Spence. Se trata del yacimiento Resolution, con un valor presente neto muy superior a Spence.
Segundo la vida del yacimiento conocido es de 50 años.
Y, tercero, es el primer gran yacimiento hipógeno que se explotará en el país en las últimas décadas. Esto último significa que es un yacimiento de sulfuros que es económicamente explotable y que está bajo el yacimiento de óxidos que se explotó en los últimos 10 años. Como este hay muchos otros que aún no han sido explotados, comenzando en el norte por Quebrada Blanca, Cerro Colorado, y siguiendo hacia el sur con El Abra, Radomiro Tomic, Gabriela Mistral, Lomas Bayas, Zaldívar, y Manto Verde. Lo que se conoce de algunos de estos indica que no sería económico explotarlos con la tecnología actual. En otras palabras, es esperanzador que BHP haya encontrado el enfoque para hacer explotable económicamente a Spence.
Ahora, hay factores que ayudan la decisión. Cuando se terminan los óxidos, que están más cerca de la superficie, y hay un hipógeno debajo, la empresa se ahorra una buena cantidad de dinero al no tener que cerrar la mina, cuestión que ocurre sólo si decide no explotar el hipógeno. Los costos de cierre son altos y también están las instalaciones y equipos que siguen vigentes y se pueden usar para el yacimiento hipógeno.
Pero no hay que equivocarse, esta decisión estaba tomada mucho antes de la última subida del precio en el último mes. Lo que miran las mineras no es el último mes, ni el próximo, sino que los próximos 10 años. Supongamos que Spence se puede construir y entrar en funcionamiento en 4 a 5 años. Existe casi unanimidad que en 2021 y 2022 el precio estará mucho más alto que ahora porque a partir de 2019 no hay más producción nueva que este entrando en producción. No importa cuán baja se haya estimado la demanda, y créanme que está pensada muy conservadoramente, faltará cobre igual. Por ello la apuesta de BHP es lógica.
Esta decisión de BHP va a desatar una carrera para llenar los espacios que se necesitan para alimentar la demanda de cobre en los próximos 10 años. El que anuncia primero tiene mayores posibilidades de apoderarse de ese segmento del mercado, a no ser que la construcción del proyecto sea más lenta que otras, o que haya barreras sociales o ambientales.
El factor que posiblemente aceleró la decisión de Spence es que las 11 mayores empresas mineras Chinas tuvieron acceso a capital durante el ciclo bajo y pudieron comprar barato, al mismo tiempo que reducían su deuda. Es decir, sacaron ventaja sobre las grandes mineras privadas.
El precio va a subir, no sabemos hasta cuanto, y ahí no hay acuerdo entre los especialistas. Tampoco hay acuerdo sobre cuán rápido subirá ni cuánto durará este ciclo alto. Hay quienes creen que será largo porque las minas de cobre se demoran mucho en ser construidas, hay otros que creen que la respuesta de la oferta será mucho más rápida. Yo estoy con los primeros.( eyn)