El mercado del cobre esperaba superávits para este y el próximo año. Sin embargo, también existía consenso de que estos superávits venían reduciéndose y serían finalmente mucho menores a lo anticipado, por lo que las previsiones de precio no contemplaban una caída tan grande como la registrada en este comienzo del año. ¿Qué explica entonces la fuerte caída del precio del cobre?
El principal gatillante ha sido la caída del precio del petróleo. Su brusco descenso ha hecho que todo el complejo de materias primas haya perdido atractivo para los inversionistas, que han redestinado sus apuestas y posiciones a otras alternativas, como por ejemplo, acciones e instrumentos en dólares.
Existe otro elemento que ha sido poco considerado, al menos en el mundo occidental, cual es el descubrimiento de un fraude en el puerto de Qindao que dio pie al desmantelamiento de un sistema de utilización de materias primas como colateral para la obtención de préstamos que luego eran destinados a la banca paralela (shadow banking) en China. Es posible que occidente subestime el impacto que este hecho tiene en una menor demanda por petróleo, cobre y otras materias primas, pero está claro que no es así en China. Fondos como Zhejiang Dunhe Investment Co, Chaos Investment Co, Flowinvest China Commodities Trading, Yihui Investment y Shanghai Discovering Investment, han tenido un comportamiento muy agresivo, y cada vez mayor peso, lo que podría explicar las variaciones del precio del cobre.
Es probable que estos fondos tengan un grado de información y percepción mucho mayor sobre el impacto de la menor demanda para uso financiero del cobre en China y de allí su comportamiento.
Desde el punto de vista de la economía global, la supuesta desaceleración en China (que es más bien una restructuración) y el lento crecimiento y/o dudas en los países desarrollados, alimentan una visión más negativa para los commodities, a lo que también contribuye un dólar más fuerte.
En este contexto, el país se pregunta si las grandes inversiones que Codelco está realizando tienen sentido. La inquietud es legítima, pero se debe hacer una clara distinción entre la inversión en los llamados proyectos estructurales y la marcha de las operaciones actuales. Los menores precios que se registran ponen presión a las actuales minas en operación de Codelco, y todas las compañías mineras en general, lo que de proseguir y acentuarse, obligaría a planes de contingencia para reducir costos.
Las decisiones de inversión en proyectos mineros no responden a los precios de períodos cortos de tiempo, sino a estimaciones de precio de largo plazo, las cuales no se han modificado. Más aún, los proyectos estructurales de Codelco son de vida o muerte para la viabilidad de la empresa. O se hacen, o Codelco deja de ser una compañía viable. El desafío de Codelco con los grandes proyectos de inversión no es el precio del cobre este o el próximo año, sino el hecho de no disponer de holguras, el tener que manejar una cartera de proyectos difícil y riesgosa, y además, que debe desarrollarlos simultáneamente.
Por otro lado, aunque tal vez Codelco no esté actuando por una definición estratégica, sino por circunstancias inevitables, es clave el efecto contracíclico de sus inversiones: construir en la parte baja del ciclo para aprovechar al máximo el período ascendente que se espera comience en un par de años.
( Fuente La Tercera )