Los comerciantes y corredoras de propiedades estiman el descenso de sus ventas en 60% en lo que va de 2016. Economista asegura que tendencia se agudizará si sigue bajando precio del cobre.
El desplome del valor del cobre, que en lo que va de 2016 promedia US$2,13695 la libra, llevó a la industria minera a implementar desde 2015, una serie de ajustes que se han traducido en desvinculaciones masivas, planes de contención de costos, revisión y término de contratos con terceros. Medidas que han impactado directamente en la economía de Calama, donde el índice de desempleo se empina en 10,4%, lo que se traduce en 7.151 personas sin trabajo.
Desocupación que se ve reflejado en los más 3 mil currículos que ha recibido la oficina municipal de Inserción Laboral (Omil), según detalló la jefa del departamento de Desarrollo Económico Local (Del), Brisa Santiago, quien entrega otro antecedente, solo en los primeros cinco meses del año gestionaron 3 mil seguros de desempleo. Los que a nivel regional suman ya 23.811, según las estadísticas de la superintendencia de Pensiones.
El comercio resiste
Crisis que conoce de cerca el presidente de la Cámara de Comercio de Calama, Rodrigo Barrera, gremio que aglutina a 50 empresarios de la ciudad. «Para el comercio la palabra hoy es resiliencia, hay que resistir este momento, reinventarse, sostenerse en este mal momento económico. Creo que este es el momento más crítico y sobre todo ahora, porque en invierno tenemos menos flujo de personas», explicó.
Barrera sobre cuándo se comenzaron a evidenciar la constricción, especificó que «desde el año 2013 se ha venido experimentando una baja, pero las peores cifras se han observado desde 2015 y en lo que corre de este 2016. Estimo que en 2013 partimos perdiendo un 20%, pero hoy ya estamos entre un 40 y un 60% de pérdida».
En este escenario, añadió el empresario, «los rubros que han sido más afectados son la hotelería, restaurantes y servicios. A eso hay que sumar otro factor que nos perjudica, que es la proliferación de los informales, como los hospedajes y los comerciantes ambulantes», lamentó.
Análisis que coincide con lo expresado por los empresarios y administradores hoteleros del sector centro de Calama, que cifran el descenso de pasajeros entre un 50 y un 80%, resultados que llevaron, por ejemplo al cierre del hotel Alfa hace un año y medio, concentrando sus operación en la Hostería, donde pese a bajar sus tarifas en un 20% siguen lamentando el déficit de clientes.
No hay arrendatarios
Mal periodo que también ha impactado con fuerza a las corredoras de propiedades que han visto descender entre un 50 y 60% la demanda de arriendos. Así lo explica la dueña de Propiedades La Serena, María Ormeño Tapia, quien asegura que en el sector «hay una baja grande, al menos familias han llegado muy pocas. Además estamos a mediados de año y el movimiento habitacional es habitualmente en febrero y marzo. También se arrendaban muchas casas como hostal u hoteles a empresas contratistas, pero hoy las faenas las están llevando a terreno, a campamento», indicó.
Sobre los valores, la también administradora dice que han bajado, pero muy poco en relación a la poca demanda que hay. «La gente, los propietarios se resisten a entender que estamos en una crisis, no quieren asimilar que los arriendos, que antes eran de 800 mil pesos, hoy no pueden superar los 500 o los 600 mil pesos, porque hay muchas casas desocupadas. Esperamos que en los próximos meses bajen los precios y podemos tener más movimiento», expresó.
En la misma línea, la ejecutiva de ventas de Biaggini Inmobiliaria, Evelyn Espinoza, estima que el flujo de gente que compra y que arrienda ha bajado en 50%, aunque esa tendencia no se ha traducido en precios más económicos. «Los valores no han bajado, pero creo que debería ir en ese sentido, porque la gente no querrá tener sus propiedades sin arrendar, sin generar ganancias. Entonces es mejor recibir un poco menos, que nada», dijo.
También bajan
El casino Marina del Sol también ha visto mermados sus resultados producto de la crisis económica que afecta a Calama, de hecho, la superintendencia de Casinos y Juegos (SCJ), informó que entre enero y mayo de este año, 91.797 personas visitaron el establecimiento de entretención, versus las 104.271 que lo hicieron en igual periodo de 2015. Es decir, 12.474 personas menos, lo que equivale a un 12% menos.
El mercado automotor vive un escenario similar, pues en promedio 30% han bajado las ventas de vehículos nuevos en las principales automotoras de Calama, lo que sus ejecutivos aseguran responde a la desaceleración económica que atraviesa el país, pero en particular al complejo periodo de ajuste que vive la minería. Tendencia que se vendría experimentando, incluso, desde 2013.
Podría agravarse
El decano de la facultad de Economía y Administración de la universidad Católica del Norte (UCN), Fernando Álvarez, consultado sobre si la economía regional debería seguir estancándose o decreciendo de seguir el pobre rendimiento del valor del cobre, explicó que «si el precio del cobre se deteriora más de lo mostrado hasta el momento hacia el corto y mediano plazo efectivamente deberíamos esperar un mayor impacto sobre la actividad económica».
Fenómeno, agregó, que «no sólo afectaría al sector minero, sino también al resto de la economía y para el caso de Calama, que hoy ha sentido el impacto de la baja en el precio, las consecuencias también se harían sentir y particularmente en el empleo y la inversión comunal».
El académico añadió que de profundizarse la crisis de la minería, existirían impactos directos sobre las industrias vinculadas a la cadena de valor de esta industria, «pero también en sectores que indirectamente se relacionan con ésta, como es la construcción, el sector financiero, comercio y servicios».
Álvarez, consultado sobre si comparte los pronósticos que vislumbran un repunte para el segundo semestre de 2018 del valor del cobre y la economía, dijo que «efectivamente hacia fines del 2018, la situación de la minería debiera comenzar a estabilizarse y comenzar a mostrar mejores precios, pues la proyección de demanda mundial supera las proyecciones de producción bajo las condiciones actuales y las inversiones en cartera más inmediatas, por lo cual se espera que a partir de fines del 2018 o 2019 el exceso de demanda mundial por cobre comience a generar presiones sobre el precio que llevarían a esperar mejores condiciones para el sector», dijo.
12.474 visitasmenos registró el casino de juegos de Calama entre enero y mayo, con relación igual periodo de 2015, según cifras de la superintendencia de Casinos de Juego (SCJ).
7.151 desempleadossumó Calama en el periodo abril-mayo según las cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE). Lo que se traduce en un 10,4%, muy lejos del promedio nacional de 6,6%.
2,13 dólarespromedia el valor de la libra de cobre en lo que va corrido de este 2016. Ayer, en tanto, el metal rojo se cotizó en US$2,19493 la libra en la Bolsa de Metales de Londres (LME).( El Mercurio de Calama)