“No pierdas ni un segundo de tiempo, pues es tu activo más valioso”.
En física se dice que un sistema tiene más inercia cuando resulta más difícil lograr un cambio en el estado original, o dicho de otro modo, es la incapacidad que tienen los sistemas de modificar por sí mismos el estado de reposo o movimiento en que se encuentran.
Nuestra Mineria ha tenido una inercia relativa en los últimos años, perdiendo oportunidades de crecimiento en expansiones de la producción de cobre, oro, plata aumento de la cartera de metales tales como fierro, Mo, Manganeso, cobalto etc. y no metálicos como Litio Bórax, carbonatos, potasio entre otros por no tener una segunda ENAMI que pueda procesar y producir otros minerales que hoy no lo hace, y hacer fomento a otros elementos que contribuyan al crecimiento del PIB, también hay inercia al no contar con una política de estado que fomente la exploración geológica volviendo a a las raíces de los años 60 en donde un exitoso programa de exploración nacional, programa naciones unidas/PNUD, logró reconocer y explorar los actuales yacimientos como Pelambres, Zaldívar, sierra Gorda Escondida etc. Que después de 40 a 50 años han logrado posicionar a Chile como el campeón del cobre mundial.
Llevamos un siglo vendiendo solo materia prima, que es lo fácil sin darle un mayor valor agregado, lo que constituye otra inercia intelectual, debemos dar el gran salto de industrializar las materias primas, así de este modo se abren nuevas oportunidades de inversión, pero ahora incorporando el poder intelectual en las nuevas fábricas, facilitando el crear centros científicos y comunidades de I&D. Perdamos el miedo y comencemos.
La falta de políticas públicas es otra inercia importante que impide el avance y crecimiento del país, la minería requiere incentivos por la gran apuesta del capital en riesgo. Las platas del Royalty deben ir a I&D y no a otras instancias,
Ahora está de moda hablar de crecimiento económico, ésto se logra en base a los mejores recursos que dispone el país, recursos naturales y servicios, es decir, el crecimiento debe estar basado en el desarrollo y fomento de la capacidad productiva de la minería, allí está la clave del éxito, y ello se hace con buenas políticas públicas.
¿Cómo salir de la inercia? Mediante la voluntad política, y escuchar a las distintas agrupaciones gremiales, institutos y centros de I+D, saber cuál sería la capacidad futura de crecimiento del sistema productivo del país será clave para las políticas públicas. Este desarrollo debe ser en base a una producción limpia y sustentable
Expandir la pequeña minería y sacarla del llamado “efecto encierro”, es decir, no crece y solo se mantiene en base a la bonanza de los buenos ciclos del precio de los metales, es un “eterno prospecto de exploración”, sin posibilidad de financiamiento a capital de trabajo a compra de activos por los bancos, hacer crecer los productores en base a cooperativas o pequeños clúster de producción sería la clave.
Reencantar a los inversionista a que nuevamente vuelvan a invertir en Chile, para ello, habrá que mostrar seriedad, una institución jurídica tributaria estable e instalar incentivos a la inversión tanto en exploración como también en proyectos de inversiones.
La minería es el motor del desarrollo del país y debemos sacarla de la inercia relativa en el que se encuentra dotándola de perseverancia. Exige líderes que la entiendan y la desarrollen, es impresentable tener el 29 % de las reservas mundiales de cobre y no sabemos sacarle provecho.
“En la lucha entre el arroyo y la roca, siempre triunfa el arroyo… no porque sea más fuerte, sino porque persevera“
Dr. Manuel Viera F.