En el primer trimestre, poco más de un tercio de la inversión que ingresó al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental corresponde a iniciativas del rubro inmobiliario. Proyectos mineros y energéticos bajaron considerablemente su participación respecto de sus promedios históricos.
Un dinámico primer trimestre fue el que vivió el sector inmobiliario. Durante los tres primeros meses del año, un total de 151 proyectos de inversión ingresaron al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), sumando una inversión por US$3.376 millones. De estos, un poco más de un tercio corresponde a iniciativas relacionadas con el rubro.
De acuerdo con un reporte elaborado por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), en base a datos del SEA, el rubro inmobiliario reportó el mayor monto asociado a ingreso al sistema y aceptado a tramitación: US$1.152 millones y US$723 millones, respectivamente, muy por sobre el promedio histórico de los últimos nueve años.
Un giro en el panorama de la inversión en Chile. Y es que según el análisis, los niveles de sectores más tradicionales, como minería y energía, evidenciaron una baja participación respecto de sus promedios históricos. En concreto, durante el primer trimestre se ingresaron 21 iniciativas mineras por US$537 millones y 27 proyectos energéticos por US$480 millones, muy debajo de los niveles históricos de ambos sectores en los últimos años para ese período, que superaban los US$4.400 millones y los US$2.100 millones, respectivamente.
Para el gerente de Estudios de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Javier Hurtado, el análisis es claro. “Respecto a la historia, más que un crecimiento muy grande de proyectos inmobiliarios, de hecho el monto subió en torno a US$300 millones, algo razonable, lo que baja notablemente son los proyectos de los otros sectores”. En opinión de Hurtado, la caída de los proyectos de inversión ligados al sector energía se explica por el bajo crecimiento económico de los últimos cuatro años, que significó poco crecimiento de la demanda, y por una sobreoferta energética.
“La necesidad de generar nuevos proyectos no se ve tan clara en estos momentos ni en el corto plazo”, dice. Respecto al rubro minero, es optimista, dados los actuales precios del cobre y las mejores perspectivas económicas, aunque enfatiza en que “Chile perdió atractivo, dado que la complejidad de aprobar un proyecto minero creció muchísimo”.
Al analizar la evolución desde 2009, durante 2017 se evidenciaron niveles lejanos al promedio histórico anual de 208 proyectos ingresados, algo que viene ocurriendo desde 2014. Sin embargo, ya se ve un cambio en la tendencia, pues el número de iniciativas de inversión ingresadas a tramitación durante el primer trimestre de 2018 aumentó 6% respecto del mismo período del año anterior. Pese a ello, el monto de las iniciativas ingresadas se redujo significativamente tanto respecto del período anterior, en 40%, como del mismo período de 2017, en 17%.
De todas formas, Hurtado es tajante es su pronóstico. “El ingreso de proyectos irá de menos a más”, estima. “La variable más importantes son las expectativas y todas las encuestas han pasado del lado pesimista al lado optimista. Y eso da pie a que los inversionistas inviertan acá”, sostiene.
Del total de proyectos ingresados al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, 109 fueron aceptados a trámite para su evaluación, por un total de US$2.755 millones. En términos de montos, corresponde al 82% del total ingresado durante en el período.
El informe también revela que 98 proyectos fueron aprobados en el primer trimestre de este año, que significó un alza de 18% respecto al primer trimestre de 2017, pero aún lejos del promedio histórico trimestral desde 2009 de 174, por una inversión esperada de US$8.400 millones. No obstante, el informe destaca que “la situación respecto a los montos aprobados es menos preocupante, ya que se encuentra en niveles superiores al promedio histórico trimestral. De hecho, para el primer trimestre del año se ubicó 70% respecto a lo exhibido hacia fines del año anterior”, dice el reporte. P( Pulso)