La minería era reconocida por estar conformada mayoritariamente por hombres, desde los que están en el yacimiento mismo hasta aquellos que ocupaban los cargos directivos en las oficinas centrales. Hoy, el escenario es distinto ya que podemos ver que cada vez más mujeres participan en áreas productivas y con diversos roles en esta industria. Sin embargo, este es sólo el inicio de un cambio necesario en términos laborales y culturales.

Los desafíos del sector con respecto a la equidad de género ya no se limitan al número o porcentaje de mujeres en la dotación. Esta realidad evolucionó y dio un paso más allá, buscando instaurar y potenciar el desarrollo y la permanencia de las mujeres en la industria, donde las políticas de inclusión no sean solo para mejorar las puntuaciones en los rankings.

Las compañías mineras si buscan seguir creciendo con exitosos resultados deben generar un cambio cultural y de gestión más profundo, ya que está comprobado que la incorporación de mujeres, y de personas con distintas experiencias y formaciones, contribuye positivamente al rendimiento de los equipos de alto desempeño.

Es una nueva manera de ver el paradigma, donde la cuota es la base y donde enfrentamos nuevos desafíos estructurales, de cultura y laborales. Este es el momento para empezar a ser creativos y aprovechar los beneficios de una minería más inclusiva.

En el seminario que encabezaremos en Expomin 2018, tendremos la oportunidad de exponer estos desafíos de género, que se tienen que abordar desde lo púbico y lo privado; podremos reflexionar acerca de nuevas soluciones e impulsar desde distintos ángulos las políticas para que éstas apalanquen el desarrollo de las mujeres en la minería, dejando atrás las conversaciones políticamente correctas y la autocomplacencia.

Ahora es cuando las mujeres deben tener su espacio en la industria minera, en este sentido, solo un 19,5% de las mujeres que se desempeña actualmente en la minería lo hace en posiciones que se asocian a la cadena de valor principal y siguen existiendo áreas de desempeño exclusivas para hombres, no precisamente por capacidades distintas, sino más bien por temas culturales.  

Está comprobado que las mujeres pueden desempeñarse en todas las áreas y la minería no es la excepción. En Chile, la incorporación de la mujer a la fuerza laboral se sitúa en torno al 45%, y la industria minera se ha destacado por tener un crecimiento sostenido en este sentido en el tiempo, lo que se valora, pero las cifras muestran que la participación de mujeres creció del 7,6 en 2012 al 8,4% en las empresas mineras. En países mineros como Canadá y Australia, donde la participación femenina en el mercado laboral supera el 70%, las mujeres representan el 19,6 y el 13,2% de la fuerza laboral minera. Es necesario innovar y apurar el paso para no quedarnos estancados y seguir creciendo como sector y país.

Necesitamos comprometernos, mirar estos nuevos desafíos de frente y ser capaces de empezar a adaptarnos a las nuevas oportunidades.

Fuente datos:

Estudio del Consejo de Competencias Mineras / Consejo Minero.

Fuerza Laboral de la gran minería en Chile 2017 – 2026.

Realizado por Innovum, Fundación Chile 2017.