The New York Times y The Financial Times se preguntaban hace unos años qué es este nuevo mineral que los analistas chinos habían empezado a considerar como el «nuevo oro minero». Les llamaba la atención que un producto explotado casi únicamente en China fuera tan valioso y que, en sus proyecciones, los analistas asiáticos lo pusieran por sobre el oro, la plata y el cobre.
Se encuentran en todos los teléfonos celulares y prácticamente en todos los productos computacionales, por lo que su potencial económico es muy grande.
Pero hoy ya está relativamente claro el valor de estos productos. Estos metales, dicen los analistas, tienen propiedades extraordinarias que los han hecho indispensables para la industria electrónica, informática, de energías renovables, así como para la fabricación de armamento y material militar. Se encuentran en toda la tierra, pero es un problema hallarlos en concentraciones que hagan viable su extracción.
Por eso es que llamó la atención que en Chile existieran vetas explotables. Específicamente en la comuna de Penco, donde la Minera Bío Lantánidos explora desde hace dos años y medio, tras lo cual anunció que apostará por el desarrollo comercial.
«Queremos ser una empresa que desarrolle y venda tecnología, lo que permitirá a la región transformarse en un polo de innovación de altísimo nivel», señala el gerente general de la empresa, Arturo Albornoz.
Para eso la compañía cuenta con el apoyo de REE Uno, firma que recibió US$ 5 millones del fondo Minería Activa, ligado a LarrainVial, y que dispone de más de US$ 20 millones -del programa Fénix- para investigar, principalmente, tierras raras.
El proyecto cuenta incluso con apoyo de la municipalidad local, pero no vería la luz al menos hasta dentro de tres años.
( Fuente: El Mercurio )